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No existe la crisis…

Estamos en un entorno inestable, hemos estado pasándolo bien un rato… pero las cosas han cambiado y tenemos que movernos de la zona de la comodidad a la zona de inquietud. Debemos entender que hay nuevos paradigmas y nuevas formas de ver las cosas. Tenemos que actuar y dejar de lloriquear en el recuerdo de lo bonito que era esto antes, de que cómodo era tener un sueldo fijo a final de mes, que cómodo era comprarse lo que no nos podíamos permitir, la crisis nos ha librado de muchas esclavitudes y como decía Einstein la única crisis es la crisis de la incompetencia. Incompetencia laboral, ética y política y el fracaso del sistema entendido como “yo existo, gasto y pretendo”.

Leer hoy esta palabras escritas en 1934 nos tiene que hacer reflexionar aún más y entender que siempre habrá una crisis hasta que no sepamos adaptarnos al nuevo entorno y sepamos leer el sistema complejo que es la sociedad moderna. Siempre habrá una crisis porque el mundo es impermanente y resistirnos a la impermanencia solo nos provoca dolor y angustia.

“Quién le echa la culpa a la crisis de sus fracasos y dificultades, arremete contra su propio talento y da más valor a las soluciones que a los problemas. La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia” (Einstein)

“El problema de las personas y los países es la pereza en el intentar soluciones y salidas. No olvidemos que sin crisis no hay desafíos. Sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. sin crisis no hay sustancia. En la crisis surge lo mejor de cada uno, porque sin crisis no hay viento, sólo brisa ligera.” (Einstein)

Aquel problema de las “subprimes” que nos había hecho pensar que no iba a afectar nuestra vida se ha trasformado en algo muy gordo que ha golpeado con fuerza el mundo empresarial en su conjunto. El intentar no limitar la economía ha sido un grave error político global. Pero como dice el mismo Peter Senge: los problemas de hoy derivan de las “soluciones” de ayer.

El libre mercado financiero ha sido un boomerang tremendo porque las mismas entidades financieras han cambiado piel. Tradicionalmente un banquero era alguien que participaba en un riesgo teniendo a cambio un beneficio, la banca moderna ha empezado a “vender sus riesgos” los fondos soberanos han hecho todo lo que han querido con estos “riesgos”, paquetizándolos, cediéndolos una y otra vez. Al final las deudas han pasado a ser activos en otras entidades. Ejecutivos sin vergüenza y políticos complacientes han permitido todo esto y hoy estamos en la situación que todos conocemos. Todo esto enmascarado en las grandes estructura. “Too Big to Fail” decían los empresarios de Lehman Brothers y sabemos todo como acabó aquello. Sin olvidar otros escándalos como el de Worldcom donde los costes de estructura y de personal se hacían pasar por activo generando la más grande “pelota” del mundo. La finanza creativa y sin control ha determinado una situación insostenible porque el sistema es insostenible. ¿Porque tiene que haber siempre más beneficio? Porque las empresas tienen accionistas y se aplasta cualquier derecho humano, lógico, de negocio o laboral para llegar siempre a más.